Prefiero las sombras...prefiero el dolor,
Prefiero la ignorancia que tener razón,
A un corazón alegre por un hecho triste,
A un cuervo sin plumas que quiere ser cisne
Sin saber que hay cisnes que teniendo plumas
Viven bajo el peso de una mancha oscura
Que vive y respire sola y alejada
Bajo una pluma blanca que tiene el ala.
No entiendo a personas que no entienden nada,
Que no entienden al Sol,
Que no entienden lo duro del llanto de una anciana,
Que no saben cuan lejos está su mañana,
Que su noche comienza pero que nunca acaba,
Que sus alegrías ya son solo ramas
En un árbol podrido que oscuro se levanta
Desde dentro de un pecho que no tiene ventanas.
Yo no entiendo a personas que no entienden nada,
Que abusan a diario y rien en las caras
De corazones tristes y débiles del alma.
Compadezco a la vida por ser tan desgraciada
Por llevar en su espalda a personas sin luz
Que sueñan con alegrías bajo un cielo azul,
Sin imaginarse, sin tener idea,
De lo complicada que será la tarea
De tener un cielo sin manchas oscuras.
Pobre cuervo frío, pobre cisne idiota,
Pobre anciana triste, pobre vida rota,
Pero sobre todo pobre del que piense, del que se imagine, del que se alimente,
Que el cisne idiota amará al cuervo frío,
Llorará junto al pecho de la anciana triste
Y pedirá perdón por un día reírse
De la lágrima presa en su cara arrugada
Y se dará cuenta de que en su vida rota...
Ya no queda nada.