Más libre cuanto más lejos de Dios
Más rebelde cuanto más lejos del Demonio
Más independiente cuanto menor sea el patrimonio
Más valiente cuando no temas decir adiós
Hay que temer a la madre naturaleza,
es de todos nuestra única casa,
donde el alma vive y el cuerpo descansa.
Donde nos hacemos humanos
admirando su belleza.
Pensad por un momento que
yo era un niño pobre
pero rico en sueños.
Teníamos el presentimiento
de ilusionárnos sobre
el futuro sintiéndonos los dueños.