LA SED DE UN BESO
¿Por qué apagaste mis noches
en los mejores momentos,
que el cielo entero se abría
para vestirte de besos?
.
He sido hiedra sublime
un inocente mancebo,
por tus miradas de luna
que traspasaban mi pecho.
-
Buscaba yo en tus ojos
aquel escondido beso,
que moraba en tu saliva
y en tus íntimos deseos,
y en las dunas de tus playas,
varadero de mis sueños,
y de mis redes y barcas,
y la rosa de los vientos,
para llevarte a mi boca
en la esquina del silencio,
y allí fenecer los dos
lentamente como fuego,
luego volver a la vida
para comenzar de nuevo,
y alejar nuestro pasado
todo el dolor y tormento,
todo el amor padecido,
y aquel sufrir en el tiempo,
todo aquel llanto encendido
en tristezas y en lamentos.
.
¿Porqué ahora vida mía
quieres el místico sueño?
Nacido en aquella tarde
con la sed de darte un beso,
en tu boca de escarlata
y así quedase el recuerdo,
en mis versos y en tus prosas
y en tus preludios de viento,
y en mis lindas mariposas,
así fundir nuestros besos,
en tus labios de amapola.