Si observaran se retira
mi vital inspiración;
eso etéreo, esa pira,
o ese punto en la sazón.
Por si escribo un garabato
que no llega ni a talón;
no le busquen pies al gato
porque cojos... versos son.
No me miren de reojo,
ni se vale escaramuza;
porque a mí decirme musa
-no, no escribas, a tu antojo-.
Decir esto no es error:
si algún verso pinta en rojo
como lo es el corazón;
no lo tildes de un abrojo,
ese verso ser de amor.
Y si en río piedra suena
y de lágrimas va lleno;
para nadie... será ajeno
que hay ricina, hasta en la vena.
Cuando ondea una bandera
por encima de una palma;
es que anuncia se libera
sentimiento, desde el alma.
Mas si estando en la cabeza
cada verso, no escribiera;
cual un vivo que muriera
sé que pesa... y se sopesa.