Un breve silencio
no me digas nada, por favor.
No te apures ni me ilusiones
si acaso, sorpréndeme
como si el tiempo no hubiese pasado
y que te has dejado ir, solo por un rato.
La verdad late sosjuzgada y silenciosa,
oculta en los rincones ocultos en la mente,
olvidada, encubierta, pesa
tan deseada y tan temida
Imágenes, pensamientos, dudas, temores
también me iría de mi misma
pero hoy es todo tan distinto
ante tanto dolor contenido
tan solo un muro más se levanta
se levanta y una puñalada trás de sí
entendió, solo eligio callar
Mané Castro Videla