Se escribe lo que se piensa sin pensar en la medida…
cuando las penas nos llegan van dejando las heridas
que nos golpean con saña destrozando nuestras vidas,
en las letras encontramos un espacio que nos guía
transformando este dolor en sentida poesía.
Cuando el mundo es un remanso que de amor nos ilumina
disfrutamos de las mieles que libamos con delicia,
observamos la belleza de la flor cuando germina
y sentimos cuando el viento nuestros rostros acaricia,
dejando atrás los momentos de esas horas tan mezquinas.
Van quedando en el pasado aquellas noches silentes
en que mi ser se encontraba perdido en la soledad,
y camino hacia la luz que me deja el sol naciente
sintiendo que más nunca estaré en la oscuridad.
Recordare con nostalgia evocando aquí en mi mente
a esos seres que se fueron a cumplir con su misión,
dejando las enseñanzas más hermosas de la vida
cinceladas con la fuerza de su noble corazón.