Mi voz, paloma blanca, te llama,
en el encendido eco de plenilunios,
y en blondas níveas calladas.
Mi voz paloma, en sus vestidos blancos,
te acaricia,
día a día, te reclama,
en tulipanes de pasión arrebolada.
Mi voz paloma
llaga su herida,
te llama en cuatro puntos cardinales,
te añora en sus vestidos primaverales.
En sus pestañas y sus pupilas,
quedó grabada tu esencia varonil.
Mi voz paloma,
es una rosa en el desierto,
que late por ti,
en todos sus pétalos.
Mi voz paloma,
se hizo corazón,
te habita, en todas
tus células,
ebulliciona de amor por ti...
Autora: Edith Elvira Colqui Rojas-Perú-D.R.A.