Nadie sabe de mi vida y de mis cosas
Todos viven en la parte divertida
No miran las espinas, solo las rosas,
Solo ven las partes buenas de la vida.
Todos quieren que le dediques tu tiempo
Cuando tienen problema y dificultad,
Pero nunca me preguntan lo que siento
Y si me encuentro en total felicidad.
Nadie sabe cuando en las noches me encierro
Y agonizo en mi triste realidad,
Mientras finjo ser tan duro como el hierro,
Más sabiendo que nada de esto es verdad.
Todos vienen a contarte sus problemas,
Pero nadie se te ofrece a escuchar
La tristeza que tu alma suave te quema,
Las penurias que te pueden trasnochar.
Nadie sabe cuando corre por mis venas
Las tristeza de una cruel desilusión,
Nadie me ayuda a poder calmar mis penas
Ni complace mis metas y mi pasión.
Nadie sabe ni procura el ayudarme
Cuando nado en mis mates de soledad,
Y de nuevo solo me queda escudarme
En un oscuro espejo de falsedad.