Alma de viuda perturbada
Eres flor que al viento
se despeina en la alborada.
Flor marchita de amor
aún estas perfumada
Al sentir los susurros
de las cuerdas del arpa
te cosquilleo hasta el alma
Eres Rosa roja de un rosal
que tu suerte esta hechada
En tu luto riguroso
llevas un negro collar
y debajo bien escondida
tu feminidad estancada
Aún conservas tu voz jugosa
Y tu destino inconforme
en abandono y desazón
Y todas las noches de luna clara
Abrazando a tu almohada
tu joven luz se apaga
tu boca de aromas a aurora
Canta el cuerpo exhuberante belleza
Eres jardín de fragancias
que tu cuerpo derrama
bebiendo la Copa amarga
Tu sonrisa de perlas cultivadas
El juego de tu pelo te delata.