Igual que se desprenden
las gotas de rocío
de las rosas fragantes,
o como se desprenden
las hojas secas
de los frondosos árboles,
así lamentablemente
se me desprendió tu amor del corazón
una tarde;
Más la rosa
seguirá alegrando con su perfume
el corazón de los amantes,
más el árbol
seguirá dando su sombra
a los cansados caminantes;
No así mi corazón
que tristemente se secó
cuando se me desprendió tu amor
una tarde...