Y guarda silencio tu boca asquerosa
hedionda a las lágrimas que te maldijeron
manchada de carmín dolarizado
sobre la inocencia que has arrebatado
Bajo la negra toga
que ostenta tus gulas
hay mil infiernos
devorando noches
engendrando miedos
que ni tu mallete logran acallar
Las fugas etílicas
son una alternativa
que no logra tu alma liberar;
el oro de tus cadenas
pesa sobre el cieno
que sustenta tu pedestal
Tu lengua ha sido tu peor aliado
cuando con su filo
hambre has liberado
y puesto en prisión
justicia y libertad
El fálico asiento
en oro bruñido
devora tus entrañas
con fuego infernal
pero la estupidez que anida en tu rostro
se ha congelado
y te ha dado faz
Llegará tu hora
ángel del averno
el filo de tu guillotina
caerá sobre tu cuello
en caricia fatal
y ni perros ni zopes irán en tu auxilio
porque la podredumbre
se los impedirá
Dormiré ahora,
me soñaré serpiente,
me soñaré halcón
en mis sueños todavía
tu inmunda vida
tiene solución