Ariello

El ángel mirón

 

 

Una hermosa mujer frente al espejo

desprendíase el traje indiferente,

y en sus ojos brillantes, de repente

la lascivia cundió como reflejo.

 

Desde el lecho, a hurtadillas y perplejo

observábala un ángel impaciente,

y al mirarla desnuda, el inocente

su inocencia perdió, se volvió viejo.

 

Un arcángel llegó para cubrirla,

aquel ángel se fue sin seducirla

con profunda ansiedad y falo enorme

 

y una luz mortecina que caía

al trasluz de la seda descubría

la esbeltez de su cuerpo garciforme.