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Te encontré bella como el amanecer,
te miré como el arcoíris que me guía hacia el tesoro,
fueron mis palabras las que siguen
la ruta del laberinto de tu mirada, te vi,
dejé que te marcharas junto a mi suspiro;
si fuera matemático
podría multiplicar lo mucho que te amo,
si fuera matemático sumaria lo bueno que hay en mi;
si fuera matemático lograría restar lo malo que ves en mí,
si fuera yo ese matemático, despejaría el odio del amor
y es que tu mirada me envuelve
buscando el factor común,
si fuera matemático y encontrara
el resultado de la ecuación que me llevara a ti
y me aproximara a tu corazón,
y es que no soy poeta de profesión
ni mucho menos matemático,
pero entre tantos signos y fórmulas
te puedo decir sin expresiones algebraicas
lo que me dicta el corazón.
Por: Alex Palacios