Cual pesadumbre en mis hombros, yo siento.
Cual plomo hunde, no miento
mi corazón, en mil trozos quebrado
sigue amando aquello ya hoy marchado.
Amargo, yo manchado
pues en dejar de sentir, jamás pienso.
Mas vivir podré, con dicho tormento
ahogado en lamento.
Mientras dejo muy profundo encerrado
lo que unía mi corazón, es pesado
por salir, ha luchado
ya cohibido, de puro agotamiento
Ardiendo en lo más profundo de mí ser,
se ve tu nombre, encerrado por mi amor,
protegiéndolo, cual flor
cual dulce blanca flor, que nunca ha de arder
Rescataros, mi flor, quiero yo poder.
Maldito sea, mi eterno por vos amor,
tierno, e infinito calor
cual causa, jamás, besar voy a poder.