La canicie, corona de hermosura
símbolo de respeto, experiencia
quien la lleva, sabe mucho de la vida
ha vivido ya algunos años, y sabe
dar algún consejo sabio, pregúntale
no te fíes del inexperto, dá palos de ciego
escucha al maestro, que puede enseñarte
el ha tropezado mucho, pero se ha levantado
la experiencia, dicen que es un grado
y es verdad, los años vividos enseñan mucho
aprende a caminar, sin orgullo, ni vanidad
eso es un lastre, pesa mucho, y no vas a llegar
a ninguna parte, atesora la humildad, porque
esa si que es grande, y no se puede comprar
respeta y serás respetado, al rico y al pobre
por igual, nunca te creas mas que nadie
pues todos vamos al mismo sitio, aprende
a subirte a hombros de gigantes, desde allí
lo vas a ver todo distinto, no te rindas ante
la adversidad, la vida es una carrera de fondo
y la tienes que ganar, para ser una persona
de provecho, no lo des todo por hecho
todos los días hay algo que aprender
si tienes fé, cultívala, cree en Dios, eso
es de sabios, párate a pensar de vez en cuando
y meditar, no te des prisa, hasta que no estés seguro
de una cosa, no te precipites a tomar decisión
cuando tengas tiempo, saca del corazón
algunas cosas, y míralas bien, no se echen a perder
el mundo no es color de rosas, aunque son muy bonitas
tambíen se suelen marchitar, y no subas muy alto
que te puedes resbalar, ten equilibrio en el andamio
valora todas las cosas buenas, las malas déjalas de lado
recuerda, hijo mío, lo que yo te he contado y
aprende a ser honrado, aunque hoy día no se lleva
no confíes solo en tí, lee, pregúna, investiga, aprende
de esta universidad que es la vida, y cuando tengas tiempo
piensa y busca pruebas, Dios existe, de seguro
que si lo buscas lo encuentras, sé un buen cristiano
y pregúntate de donde venimos y a donde nos vamos
hallaras la respuesta, pues no anda lejos de ti
aprende a sufrir si te toca, y no olvides que hay
quienes sufren mas que tu, ten cuidado con los amigos
huye de los deseos de la juventud, no son buenos
el amor es grande, no seas tacaño, úsalo a diario
recuérdame de vez en cuando, yo sé poco hijo
y nada puedo dejarte, solo un corazón cansado
una Biblia y un abrazo muy grande...