El pájaro de la mañana
canta alborotado
un trinar de pasión
en su nido,
En las ramas
estalla la vida,
cae de lleno el sol
una brisa serena se cuela
penetra el corazón
y los poros del alma.
La frescura asentada,
llama de olor
a tierra mojada,
nos recorre la luz
el brillo en los ojos
dando el relieve
que necesita el amor.
Entrelazados
manos con manos
nos abraza
la segura soledad
compartida,
hilo invisible nos une
conteniendo al mundo entero,
saboreámos la distancia,
tan cerca y
tan lejos...
6-6-2017