La seda de tu elegante vestidura,
tan sutil, decorosa y brillante
contrasta con mi traje sin albura,
que esconde este cuerpo de tunante.
Tu hermosura, tu faz, tus grandes ojos
que me embriagan, me endulzan y estremecen
me humillan y me postran de hinojos;
cuando -tú no eres- decirme parecen.
¿Yo?, esto es un sueño, no he de tenerte
porque indigno soy de a ti pertenecerte,
soy tan solo la sombra fugitiva
que jamás renunciará a acompañarte,
y aunque tú le seas siempre esquiva
tras de ti irá, mas no ha de dejarte...
Bolívar Delgado Arce
De: \"Pinceladas de un Sueño\"
BLOG: \"A lo lejos alguien canta...\"