Como no he venido aquí a generar polémica
ni a alimentar a los polemistas, el imaginario
club de los Poetas Más Merecedores (PMM),
ha pasado a mejor vida.
Si he logrado despertar algunas conciencias,
mi labor está recompensada.
Gracias.
Continuación al tema de ayer.
Y en otra conferencia advierte: \"Empiezan a surgir
los sobrerrealistas, que se entregan a los latidos
últimos del alma. Ya la pintura libertada por las
abstracciones disciplinadas del cubismo, dueña de
una inmensa técnica de siglos, entra en un período
(o periodo) místico, incontrolado, de suprema
belleza. Se empieza a expresar lo inexpresable.
El mar cabe dentro de una naranja y un insecto
pequeñito puede asombrar a todo el ritmo planetario,
donde un caballo tendido lleva una inquietante huella
en sus ojos fijos y fuera de lo mortal\".
Sin duda Dalí observa emocionado la paulatina trans-
formación de su amigo hacia esa nueva visión del arte.
Pero lo que Dalí no sabe y Federico, probablemente
tampoco, es que la grandeza del segundo es, si cabe,
mayor, por cuanto es perfectamente capaz de asumir
como propia, la visión ajena; mientras que el primero
nunca pudo hacerse con la mirada de Federico. Pero lo
que sí sabe García Lorca es que la vida avanza y...
.
Continuará