emiliodom
MADRUGADA
Aquella madrugada, el cielo mostró su color azul pastel,
esperando la llegada del alba, con placidez y sin rencores.
La playa, sigue acumulando cemento de lujo, donde
rompen las olas, intentando reciclar el color natural y el
verde esperanza, con la finalidad, de ofrecernos alguna
que otra sonrisa oculta en los rincones, donde los
políticos, suelen jugar a ser equilibristas mentirosos...
¡Acepto, que he sido algo extravagante, convirtiendo las
angustias, en una especie de canto clandestino!!.
¡Entiendo y comprendo, que la vida se nos va en pronunciar
discursos, pero lo cierto y verdad, es que de poco
me ha servido!!
En ocasiones, se aleja lo que tanto queremos, haciéndolo
como el agua que se escurre entre las manos..