Pedro Ruiz Lopez

TÚ SIGUES SIENDO PRINCESA

Por siempre te llamaron, la princesa,

Tu gran amor divino, está en el cielo,

Dejándote en la vida, tres regalos,

Que serán en tu vida, gran consuelo.

 

Tres hijos fabulosos, tanto adoras,

Tus tres grandes regalos, son tan bellos,

Otro regalo, te llegó del cielo,

Si es preciso, tu vida das por ellos,

 

Como divina madre, ya triunfaste,

También lo demostraste, como esposa,

Aún tú te conservas, siendo bella,

Siempre bella pareces, una rosa.

 

Princesa que tú forjas, tantos sueños,

Y que a tantos inquietas, por amor,

Y tantos bien quisieran, ser tu dueño,

En eso tú decides, lo mejor.

 

Un gran ejemplo muestras, un modelo,

Como persona, tan realizada,

Bueno es que te conserves, tan alegre,

Que adornes con sonrisas, tu mirada.