Que te fueras fue de las mejores cosas que me pudo pasar...
Aprendí a valorarme sin medida, a construir una vida social sin esperar el horario de nadie.
Aprendí que los sueños propios son más y que para vivir uno compartido se debe haber vencido al menos uno propio.
Aprendí a sonreirme, vivirme, bailarme y sobre todo amarme.
Aprendí que no hay fronteras y puedo cumplir y llegar donde quiera
Aprendí a respetarme, aceptarme y hacer lo que realmente me da la gana pensando que mi felicidad y tranquilidad son lo único importante para continuar.
Aprendí que el amor es una etapa más que complementa la vida no la razón de vivir.
Aprendí a valorar una pareja y a entender que para amar debes elegirte a ti para saber elegir quien te sepa amar.
Aprendí que el miedo a la soledad es simplemente el miedo a disfrutarte tanto que ya cualquiera no puede estar.
Aprendí aceptar las cosas con más calma, igual de amor nadie se muere y cuando cierras el ciclo con amor y entendimiento sabrás que de nuevo llegarán a cubrirte de besos.
Y por fin entendí las mil veces que con dolor pregunté por qué te tenías que ir...