Mi pensamiento
Vuela, como un águila
Y se reúne
Con el tuyo.
Y entrelazados
Recorremos
Valles
Montañas y praderas.
Y vivimos en la magia
De un mundo irreal.
Sin odios
Ni rencores.
Esa magia
Está sustentada
Por el amor.
Donde no hay fronteras.
Y el amor
Es tan inmenso.
Que, Nuestro Dios
Nos amo
De tal manera.
Que dio a su hijo unigénito
Para salvar al mundo.
A los suyos vino.
Y no lo aceptaron. Pero.
A los que le aceptan.
Tienen, el poder.
De ser
Hechos.
Hijos
De Dios.