Y del Ávila

Leche y Miel!

 

Loado sea tu seno bendito, que como un rio desbordado de leche y miel, ofrendas a tu hijo, sea cual fuere la circunstancia y que sólo teniendo como norte, la boca ansiosa de amor y alimento, se regocija en la satisfacción de la entrega. 

Una joven madre, Liliana Corrales, otra venezolana que lucha por el futuro de su hijo, le privan de abrazar a su bebé y como una limosna de caridad, sólo puede darle el pecho a su niño, a través de una injusta reja que pretende encarcelar el sueño de un país libre y con futuro para todos los venezolanos.