Como mariposa vuelo por el mundo.
Mis lágrimas caen constantes como goteras de agua.
No me detengo porque si no, no vuelvo a volar.
Mi tristeza atraviesa mi alma que llorando me acompaña.
Atravesando mares, subiendo montañas.
Llegando al cielo donde Dios me consolará.
A ti también te dejo volar, porque aquí no nos pudimos amar.
Solo tenemos la ilusión, de en el cielo volvernos a encontrar.
Y como ángeles, felices nos volveremos a enamorar.