Amanece como siempre
pero nunca es como siempre.
Hoy
No hay más juegos,
amanece la niña ahorcada,
ignominia de un dios de jugete,
Y duerme en la cama
de lágrimas infinitas
y de flores blancas.
¿Amanece?
A pesar de ti
Y con todo el fulgor
Del gris celeste,
Si.
A pesar de mi
También.