Tengo miedo y me siento
como una noria que gira y da vueltas en mi interior
y excita mi alma.
Sube y baja, y cuando llego a lo más alto
observo el suelo con pánico
porque temo caerme y estrellarme.
Tengo miedo de contraer un cáncer y morirme,
de que el Ébola visite mi casa,
que mis hijas se maten en un accidente,
que mi amado se canse de mí y me abandone,
de arruinarme y que los bancos embarguen mis propiedades,
de que me desahucien de mi casa y me dejen tirada en la calle,
de ser víctima de puñaladas traidoras de la gente.
Tengo miedo, el día es gris y lluvioso,
triste sin la fiesta del sol.
Este mundo podrido agoniza,
la gente está asustada porque no sabe cómo terminará
y la muerte del mundo acaba con mi vida.
Mis ojos no ven nada y mis oídos no oyen nada.