Eres adverbio del presente y sonrisas del ayer,
las heridas más profundas que mañana sostendré.
Tan, todo, nada, muy, mucho, poco, bella,
decoración en el camino hacia el infierno;
risas, bromas, historias, brindis de cantina,
el bailar rozando la piel llenos de alegría.
Eres como una palabra pronunciada bajo el agua,
el deseo fiel y fervoroso de un amante principiante.
Eres mucho más que los ripios que escribo pensando en ti.