En tu boca florece una noche
que me encanta silenciar
mientras recito caricia a caricia
el poema dulce de tu piel,
En tu piel se embriaga una paloma
que me encanta ver volar
mientras me enveneno del pétalo cicuta
de tu beso, de tu sexo, de tu verso,
Y en tu noche, y en mi cuerpo
y en tu verso, y en mi sexo,
y en mi pecho, y en silencio, y en lo oscuro
nos habita una muerte
que nos encanta recorrer
y nos beso, y nos rezo,
y nos muero, y nos nazco, y nos pierdo
en tu voz, en silencio,
en mis noches, en tu piel.