Yo tenía una amiga
Y hablábamos de la nada
Y de la nada hacíamos un universo
Llenos de palabras absolutas
Sin eco y sin repetición
Y yo tenía una amiga
Ella hablaba de duendes y hadas
De pasos y versos
De viajes y puertas abiertas
De vestidos y rezos.
Hoy nosotros ya no hablamos
A mi amiga se le olvidó
Que sin querer buscamos
Lo que el tiempo borró
Pero aún más nos amábamos
y la princesa jamás despertó
Todos la lloramos
Y el caballero jamás la mencionó.