CONDENA
...
Siento frío he querido caminar
sin rumbo ni sentido soy la pena,
y un orate farsante cuya condena
es vivir sin soñar ni protestar.
.
Qué penoso es sentirse así, doblar
la página del libro y ver la trena,
de todos mis demonios que me frena
en el camino que deseo arar.
.
Atrás quedó esa infancia y la energía
de aquel que se creía amo del mundo,
que vaga con delirio confundido
.
por esas ocasiones día a día;
que perdió tormentoso en el submundo
de la angustia... confieso ¡estoy vencido!
...
Un beso y una flor
Alfredo Daniel Lopez