Los tiempos de bonanza, son pequeños,
Un tiempo tan difícil, no es tan breve,
Un dolor tan eterno, siendo leve,
Que luego los recuerdas en tus sueños.
Pones a veces todos tus empeños,
Cuando es la vida blanca como nieve,
Un amor te llegó ya te conmueve,
Con caricias y besos como ensueños.
Segundos tan eternos, en su ausencia,
Los años tan pequeños, a su lado,
Un siglo siento corto, en su presencia.
Quisiera ya un segundo tan privado,
Gozando solamente de su esencia,
La medida del tiempo ya he olvidado.