Ya me cansé del teléfono y de los mensajes;
hoy, Adorada Vecina, tú eres la noticia;
¿Qué cocinaste?
Ya es tiempo que juntos vayamos,
temprano al mercado;
tiempo ya, que nos miremos a los ojos,
cada mañana y nos sentemos a la misma mesita,
por las tardes;
no me preguntes qué haremos;
ni cómo lo haremos;
hagámoslo;
hoy, Adorada Vecina, tú eres la noticia;
A veces,
te lo juro,
los poetas se complican la vida;
si te pregunto «¿qué comiste?»,
me gustaría tanto ponerme el gorro cocinero
y delantal de chef,
unicamente para cuidar tu dieta;
si tantas veces Buenas Noches aparece,
con mil corazones;
me gustaría ser también tu almohada;
tanto, Adorada Vecina, me gustaría,
sentarme a tu lado;
tú eres poesía;
en todo lo que hagas;
Continuará...