Que a través del tiempo he cambiado,
que ya no doy todo por nada,
pero en un mundo que camina sin ver,
fui a sacarme de donde estaba olvidada.
La felicidad y la desdicha son dos caramelos,
dulce o amargo, no dice en su envoltura,
los he tragado con o sin voluntad,
y para esta celebracion de mis años,
ya me permito dosis de locura.