Y se presento; inesperadamente,
al oír por primera vez tú voz,
dentro de lo melancólico y confuso,
supe que podía pintar,
mi alma del color que deseará.
Tan profundo no solo fue,
observe tu mirada,
entre mil imágenes,
y creando canciones.
Sentí tú dolor,
y dormí contigo,
con tu presencia,
con tú voz.
Las almas llegan a encontrarse,
por más infinita distancia que exista,
te encontraré contra viento y marea.
Se que te han lastimado,
más allá de la imaginación,
más allá de lo que uno
puede comprender.
Ahora se que un montón,
de chicas acabán con el,
hombre equivocado.
A través del dolor,
te escucharé,
dormiré contigo,
en mi más sublime deseo.
Ahora lo se,
te encontraré,
en mi respirar,
en cada flor,
en cualquier melodía.
Para llenarte,
de un amor inalcanzable,
sin nombre,
sin que me beses,
libre y sincero.
De un amanecer,
hasta que la luna,
nos bendiga,
con su adiós.
!!!