El destino, se precipita
a burlarse de lo establecido,
requerimientos –impuntuales…
Múltiples razones
como suficientes argumentos,
hoy, son nada; ayer, han muerto…
Un antes y dos después
–única historia–,
conservada en aducidas etiquetas.
Hace tiempo –banales cicatrices...
Sí, a mitades; pero, entera;
íntegramente lastimada
con la di-solución forzada…
Un pacto de silencio –indiferencia…
Autor: Lilia Quituisaca-Samaniego