Una eternidad en la mente.
Pero, aprisionar al tiempo no es suficiente para conocer la verdad, tienes que morir para olvidar la fe, porque nadie regresa después de la muerte, tal vez, solo exista el infierno.
Y renacer ...
Y tocar el arpa en la rivera aunque tenga el grito de rocas mojadas o burbujas silenciosas, la cocafonía siempre estremecerá la armonía.