Sumido en la inconsciencia y sin dolor
partiré hoy al misterio de lo incierto.
No hay tesoro en la tierra de un valor
que ella pueda aceptarlo como cierto.
Son claras las palabras del doctor
en la noche mi cuerpo estará muerto
de la vida yo seré su desertor.
Siento frío en el medio del desierto.
Me engañare diciendo, Dios existe
no quiero que el final sea tan triste.
Una mentira más, entre otras tantas.
No miraré atrás, es mi destino
ya bebí de la copa todo el vino
es hora de la tierra como mantas.