Hoy por primera vez, te sentí en otra dimensión,
No podía tocarte, no sentía tu olor, ni tu calor,
Me sentí como un solo riel, como una moneda,
Con la una cara borrada, nuestras bisagras
Ya no encajaban…
Te recordé en un vino con alma de vinagre,
En una guitarra con cuerdas de nieve,
En una estación con un pasajero,
En una película con el Fin al comienzo.
Tu mi amante perfecta, ya no lo eres,
Llegaste inesperadamente y, hoy te esfumaste.
Tu infinita pasión volvió a la lámpara encantada,
Tus caricias las encuaderne en un libro, que leeré
Cuando llegue al purgatorio que me inventaste.
Sonrió, barajo tus recuerdos y los tiendo en el cordel,
Te hago el amor de memoria y, te pregunto,
Porque te empeñaste en borrar mi pasado?
Porque insististe en inventar mi futuro?
No hay duda, ahora lo sé,
Encontré mi realidad, cuando te escogí
Y entendí a la mentira, cuando te perdí.