Que nadie se entere…
susurraste en mi oído
y destapaste mis ojos
y despareció el olvido
Que nadie se entere…
dijiste mientras tu labio
hacía fiesta en mi cuello
y besaba tierno y sabio
y allí, en aquel rincón
de tu lejana tierra supe
guardar en secreto fiel
cuanto de tí, contuve
mi pecho estallando
de felicidad humana
dando todo de mí…
madre, amiga, hermana
Que nadie se entere…
dijiste entre tu verso
mientras descansabas
en mi vientre terso…
Que nadie se entere...
que en nuestra humedad,
te digo embelesada...
se sienta hoy la eternidad.