Enclavado en un bello acantilado,
donde rompen las olas del mar
se halla el faro grande y majestuoso.
De día es un mirador de hermosas vistas panorámicas
Y por la noche orienta a los barcos
que navegan sobre el mar.
Soy como el faro
ilumino la noche de tu alma
cuando tu amor se apaga y brilla la soledad.
Y por el día soy la brújula
que te guía en el sendero del amor.
Si algún día mi luz fallara
¿ Cómo podré encaminarte en el sendero del amor?
y acaso serás como un barco perdido
navegando entre grandes olas
cuya resaca te desorienta aun más y más.
Por eso te digo cariño:
“ cuídame que soy tu faro”