En la orilla tranquilamente espero el ocaso del sol, el mar salpica mi corazón; hoy escucho su canto, el rumor de las olas golpeando sus aguas, y aunque la marea está creciendo y yo esté en medio sentado en estas rocas, quizás me vuelvo parte de estas aguas intranquilas, pero es parte de mi calma, el viento recorre su superficie levantando grandes olas y mi ira se ve apaciguada por tan hermosa melodía, Corazón, mi corazón que encallas en la isla del olvido, corazón vagabundo deja de naufragar. Mar que calma mis llantos y me tranquiliza. Hoy me vuelvo parte de ti, pues tu tranquilidad es mi tranquilidad, tu intranquilidad es mi intranquilidad. Mas refresca mi mente y me haces soñar con un nuevo mañana....
Por: ALEX PALACIOS