Las noches se hacen largas el tiempo se colgo en el pasado y no pasan los segundos solo se detuvieron solo en aquel momento en que tu me dejaste y te marchas te a otros brazos.
Las estrellas desaparecen, las estelas se desvainan en la oscuridad de nuestro manto.
Ya solo existe las luces pálidas de calles donde aquellos débiles luceros iluminaban esos días contigo.
La luna se volvió melancólica, la habitación se siente fría sin tu presencia, el amor se me desborda entre las palmas de mis manos.
Me siento triste, sin consuelo, sin ti yo no vivo y me desnutro sin tus besos, me lleno de culpa de haberte conocido por haber herido mi alma al ver con mis ciegos ojos el desamor.
Con heridas incurables, que dejaron marcas en mi pecho. Mis lágrimas recorren mi pálida piel hasta caer al abismo del olvido.