Cómo será la muerte
sin tus labios para besar
no ver el amanecer iluminar
el camino polvoriento
que me lleva
sin saber del horizonte que vendrá.
Cómo será sin vos
de tu aroma a hierbas
en los cabellos
en los árboles
esos, que dan sosiego
al ardor del medio día.
La muerte quieta
sin los vientos de la tormenta
ni ese olor primero
de tierra húmeda
con nubes negras arrollando
la tarde de estío.
Cómo será sin tus manos
recorriendo mi cuerpo
cómo será la noche
sin las estrellas
de tu mirar.
La muerte ha de llevarme
me abrazará con amor
y mis labios
querrán gritar tu nombre
pero solo podrán besar
esa boca ausente.
Y nacerá un amor nuevo
de quién amó
la más bella mujer en vida
enamorando la muerte
en la faz que no existe
en la mirada extraviada en la oscura nada.
Viajaré con ella
al vacío absoluto
abrazando su talle
sentiré nacer sus carnes
pudiendo, definitivamente
besar esos labios nuevos
para ver brillar su mirar
como nuevos soles
en la maravilla jamás vista
de su amor sin destino.