Exquisito momento es sentir que las hojas comparten nuestro amor en un mundo de letras, y en la complicidad sensual de nuestra escritura, iniciamos excitante lectura, que da paso al placer de interminables caricias que perciben nuestros sentidos al fundirse en la piel. Cercas y distantes llegan poemas para el deleite de los mas grandes amantes.
Y la vida continúa…