Al filo de dos abismos camino,
se han marchado las gaviotas y
y sólo quedan buitres que
vuelan sobre mi cabeza,
pero me importa una........
porque mis flores ya no se
asustan cuando les pasa un
un gran cocodrilo cerca,
de fondo se escucha un
blues
como un cuchillo filoso
que me corta y me hace
sangrar pero no me
desangra
porque mi sangre es más
abundante y profunda
que mis heridas.
Si es cierto voy de rodillas,
pero con la cabeza en alto,
porque no me detengo a
pesar de las lunas negras,
que llevo sobre mis
espaldas y que me pesan
como una tonelada de
plomo;
todo parece sombrío
como si la esperanza se
hubiera vestido de luto,
pero mi corazón sigue verde
y fuerte y mis neuronas
han enriquecido y
fortalecido,
un mar de dudas afloran
en mi interior
parece que mi entorno
se ha convertido en tierra
propicias, para que crezcan
miles de hongos malignos,
pero la lluvia bajo la cual
he seguido mi doloroso camino,
no ha caído y se ha perdido,
ni las semillas,
que he esparcido,
mientras herido continuo a mi destino.
Vuelvo la mirada hacia atrás,
y veo el bosque que he dejado como legado,
tomo nuevas fuerzas y me levanto ,
con mi cabeza en alto y mi corazón lleno de orgullo bueno y verde,
mañana de seguro me volveré a caer,
soy un ser humano,
pero no me detendré,
con el alma en las manos,
seguiré
porque tengo corazón de soldado verde.