Miro el cielo que me acompaña
Y esta mañana está gris,
Así como ayer,
Como toda la semana.
Unas pequeñas y frías gotas
Me estremecen
Al caer sobre mi cara
En derredor la gente taciturna
Camina sin levantar la mirada
Los otrora felices árboles
Hoy lucen pálidos
Como si la vida los hubiera abandonado
Como si no quisieran despertar
Como si quisieran abrigarse
Un poco más
Ante esta triste mañana de invierno
Que invita a todo el mundo
A quedarse en casa.
No hay aves cantando
No hay música alguna
Que alegre esta fría mañana.
Ya casi nadie sonríe,
Solamente se mueven
Cual frías máquinas
Para cumplir su jornada.
Aspiro con ansiedad
El aire frío de la mañana;
Cierro mis ojos y levanto vuelo
En una música celestial
Que pareciera que sólo a mi
Me acompaña...
Sonrío...
Y ahora veo que la vida
A pesar de ser gris, fría
Con gotas de lluvia en la cara
Es y será un regalo extraordinario
Para todo aquel que quiera
Disfrutarla...
Sonrío...
Pues hoy como ayer
Y, Dios quiera que, también mañana
Sé que me amas.
Sé que volveré a tus brazos
A tus tiernas caricias
Y a tus ardientes besos
Y eso... Eso es suficiente
Para alegrar la más fría
Gris, triste y lúgubre mañana.
Hoy soy nuevamente feliz
Y un frío cielo gris
Me alegra el alma...