Las palabras abren o cierran caminos
siembran alegrías o lágrimas
cultivan rosas o espinos
abren brecha en el alma...
Sencillas palabras de amor
bálsamo, para la herida que sangra
acariciando un corazón, roto
por palabras amargas, sin razón
la verdad siempre cabalga...
Me paro en la esquina, y miro el reloj
ya es tarde, la vida se pasa
en un rincón, los pensamientos
descansan, a la pálida luz
de una ilusión amarga, ay
escuela del saber, que poco me has
enseñado, por eso he caído
por eso he fracasado, no sabia
el camino, me han engañado...
Sigo, en la distancia, mis ansias
me sirven de abrigo, lunático
me dicen mis amigos, falsos consoladóres
que no conocen caminos
todo se va desojándo, hasta
el árbol mas fornido
lo acaban derribando...
Cansados ya, los pasos lentos
la mirada perdida
cuanto lamento, haber
pasado por esta vida...
Si bien es cierto, que gracias
a Dios, lamo mis heridas
pero hay alguien, que pone
los ungüentos, y me ayuda
a caminar día a día...