Lo contrario del Amor
no es el Odio
que hace añicos los cristales
del alma
de los demás
y de uno mismo
-sobre todo de uno mismo-.
Lo contrario del Amor
es el Egoísmo
que es una piedra bruta
cuyas formas de no-amor
son: la Vanidad
el Orgullo y la Soberbia.
La Vanidad
del que no ama a nadie
porque no tiene amor
para dar
porque se ama solo a sí
mismo.
El Orgullo
de quien tiene amor
lastimado
y teme darlo
porque tiene miedo
a ser rechazado
y le atemoriza
darlo.
La Soberbia
del que teniendo mucho
amor que dar
no lo da
porque espera que
se lo pidan.
Estas tres
formas de actuar
del Egoísmo son
lo contrario del Amor.
Lo contrario del amor
no es el Odio.
El Odio es el Egoísmo
en estado de guerra
y su arma es la Ira
que lo destroza todo
y a todos
pero sobre todo
al iracundo.
Más aún si el iracundo
es vanidoso
es orgulloso
o es soberbio.