El grito
llegó como un viento
sacudiendo las copas de los árboles
no se detuvo, en las montañas
por la pendiente subió
arrastrando nubes
violando los azules del cielo.
Todo se tornó turbio
las aves volaban sin posarse
el mar retiró sus aguas
dejando tras de si
peces muertos.
Del norte
como un manto
fue cubriendo negra, la tormenta
……...
el aire tenso
aprisionaba el pecho
sabía que algo pasaba
ese grito
regresaba por el otro horizonte
con enormes olas
y ese cielo rojo
de pasión.
Una vez más
llega ese grito
arrasado de vientos
las aguas me cubren
en infinito torbellino
muero en ese fondo revuelto
que en una eternidad
me lleva
a la superficie
entregándome
al aire
y
ese sol voraz
sobre
las arenas
de tu cuerpo
hecho mío.