Se el baile, no el bailador.
Las pinturas y no el pintor;
olvida al músico, se la canción.
Se la risa, no el comediante,
la voz, deja el cantante.
La nota, no el instrumento,
se lo bello que llevas dentro.
Se los versos y no el poeta,
las creencias ya sin profeta.
La magia, no el adivino,
los juegos en el casino.
Se la cura, no el sanador
el espacio sin escultor;
diseños y no ingeniero.
Se la flor, vende el florero.
Se y piensa, ¡yo quiero ser!
lo que creas, puedes hacer,
solo pregunta, ¿ser o no ser?.